Los asesinatos de dos mujeres, en Valencia y Ponte Caldelas (Pontevedra) concentran un día más al Ayuntamiento
Mostrar su rechazo a la violencia de género que se ha cobrado dos víctimas más, es el objetivo de las concentraciones que convoca y realiza el Ayuntamiento de Parla, a través de la concejalía de Mujer. El mes de diciembre ha arrancado con los asesinatos de dos mujeres, una de 25 años, en Valencia, y otra en la localidad pontevedresa de Ponte Caldelas.
01/12/2008 00:00
Por un lado, una mujer de 25 años ha muerto en Valencia al recibir numerosas puñaladas supuestamente infligidas por su compañero sentimenal, de 33, quien posteriormente se intentó suicidar. El suceso se produjo sobre las 17.45 horas del domingo, 30 de noviembre, en un piso de la avenida Ecuador, donde residían la víctima y su presunto agresor. Fuentes del Cuerpo Nacional de Policía, que recibieron aviso de una pelea, explicaron que los servicios sanitarios acudieron rápidamente a la vivienda, pero sólo pudieron certificar la muerte de la mujer. El cuerpo de ésta presentaba múltiples heridas de arma blanca. Su compañero estaba gravemente herido y fue conducido en estado crítico al Hospital La Fe, de la capital valenciana. El hombre había intentado degollarse después de quitar la vida a su compañera sentimental. Los médicos comprobaron que tenía también heridas de arma blanca por el cuerpo.
Por otro lado, un preso de la cárcel de A Lama (Pontevedra) mató a su novia e hirió a otras tres personas durante un permiso. La mujer fallecida nunca le había denunciado, e incluso había pedido que lo pusieran en libertad, según explicó el director del centro penitenciario, José Antonio González Novoa. El interno, Maximino Couto, era un maltratador reincidente y se encontraba precisamente cumpliendo una condena por violencia de género, contra su ex mujer, de la que tenía una orden de alejamiento que pesaba sobre ella y sobre sus hijos. Couto asesinó presuntamente de un fuerte golpe en la cabeza a su actual compañera sentimental, María del Rosario Peso, de 57 años, en el domicilio que compartían en Ponte Caldelas. La víctima no había presentado nunca ninguna denuncia por malos tratos. Según la hipótesis que baraja la Guardia Civil, el hombre, de 60 años, agarró por la ropa a su víctima y la golpeó varias veces contra el suelo. El cuerpo de la mujer fue encontrado sobre un gran charco de sangre a la altura de la cabeza. En el momento de su detención, Maximino Couto llevaba en su muñeca una pulsera de control para evitar que se acercara a su ex esposa, quien logró salvar la vida gracias a un golpe de suerte, ya que no estaba en casa.El presidiario había sido condenado por agresiones reiteradas a su ex mujer y a sus hijos y sobre él pesaba una orden de alejamiento de todos los miembros de su familia.
Con los dos crímenes de ayer, en Pontevedra y la Comunidad Valenciana, el número de mujeres asesinadas por sus parejas este año asciende a 59.
Con esta concentración se cumple una moción aprobada el pasado mes de noviembre, con la unanimidad de los tres grupos políticos, que tenía entre sus objetivos manifestar la enérgica repulsa a la violencia contra las mujeres y trabajar con las administraciones central y regional para poner todos los recursos posibles a disposición de las mujeres víctimas. Para ello, se adquirió el compromiso de convocar concentraciones silenciosas ante cada crimen machista que se produzca.
Este compromiso se está cumpliendo y, sólo en lo que va de año, la concejalía de Mujer ha realizado más de una treintena de concentraciones. La de hoy, se celebra en repulsa por el asesinato de una mujer, en Logroño, que fue apuñalada por su ex pareja –que posteriormente se suicidó-, sobre el que pesaba una orden de alejamiento desde que, en marzo, la mujer le denunciara por malos tratos.
La triste lista de víctimas a las que se rinde homenaje con estas concentraciones, arrancó el 18 de noviembre de 2007, cuando una mujer de nacionalidad china fue asesinada por su ex pareja –que después se suicidó- en Gran Canaria. Al final de ese año eran 70 las mujeres fallecidas a causa de la violencia de género. Este año, la primera víctima falleció, a manos de su pareja –un alemán de 59 años- el 4 de enero. A partir de ahí, han sido asesinadas 36 mujeres, sin contabilizar otras víctimas de la violencia domésticas –como hijos, padres o madres-, ni los casos que no son considerados como tal por los investigadores. Y por todas ellas, la concejalía de la Mujer ha convocado concentraciones silenciosas para condenar sus asesinatos.
Además, la corporación municipal se comprometió a apoyar a las organizaciones sociales que defienden la igualad y específicamente a las mujeres que trabajan con víctimas de la violencia de género. El Ayuntamiento continuará poniendo en marcha programas educativos y campañas donde los hombres sean una herramienta más para erradicar esta violencia e impulsará programas específicos para abordar la situación de las mujeres en situaciones de especial vulnerabilidad en la ciudad.
Por último, el Ayuntamiento se comprometió a colaborar con la Comunidad de Madrid y el Gobierno central para poner a disposición de las mujeres víctimas todos los recursos que necesiten, al tiempo que solicitarán a ambas administraciones que aumenten las partidas que transfieren a las corporaciones locales para aumentar las actuaciones contra la violencia de género, en desarrollo de las actuaciones recogidas en la ley 3/2004. Todos los compromisos de la moción se están llevando a cabo.