El Ayuntamiento de Parla difunde dos decálogos de consejos para mejorar la seguridad de los niños y niñas en las piscinas
A través de la recién creada Concejalía de Infancia y Adolescencia.
14/08/2019 11:38
El Ayuntamiento de Parla, a través de la recién creada Concejalía de Infancia y Adolescencia, ha lanzado una veintena de recomendaciones con el objetivo de mejorar la seguridad de los niños, niñas y adolescentes en las piscinas, tanto municipales como privadas. Los consejos se dividen en dos decálogos, el primero dirigido a los pequeños y un segundo destinado a los adultos responsables de ellos.
Juegos con globos de agua, riegos con mangueras y baños en las piscinas son algunas de las actividades más refrescantes a las que durante el verano recurren muchos ciudadanos de todas las edades… La Concejalía de Infancia y Adolescencia recomienda este tipo de entretenimiento por sus beneficios a nivel físico, sensorial y relacional, además de por ser una oportunidad para compartir momentos de ocio en familia y con los amigos.
Pero, al mismo tiempo, desde esta área municipal se recuerda la importancia de extremar las precauciones para garantizar la seguridad de pequeños y adolescentes en espacios acuáticos. Para ello, ofrece dos decálogos de recomendaciones dirigidos por un lado a los niños, niñas y jóvenes, y por otro a sus padres, madres o adultos responsables.
En el caso del primer decálogo de consejos, la Concejalía aconseja leerlo junto a los menores. Las recomendaciones de seguridad para ellos son los siguientes:
- Báñate siempre en compañía de un adulto.
- Si aún no sabes nadar con seguridad, usa manguitos o un chaleco flotador adaptado siempre a tu tamaño y correctamente colocado.
- Ten mucho cuidado con los bordillos, escaleras y toboganes, especialmente si están húmedos ya que pueden ser muy resbaladizos.
- Respeta la digestión: no te metas en la piscina inmediatamente después de comer.
- No te lances de golpe en la piscina, mejor poco a poco para no hacerte daño.
- Recoge los juguetes que metas en la piscina cuando salgas, para que otras niñas y niños no se lancen a por ellos.
- Avisa a los mayores si ves que alguien se ha caído en la piscina o se ha hecho daño.
- No te cueles nunca en piscinas cerradas.
- Juega en la parte de la piscina en la que haces pie.
- Aprende a nadar cuanto antes.
El decálogo de consejos dirigidos a los padres, madres, familiares y resto de adultos que acompañan a los menores en las piscinas u otros espacios acuáticos es el siguiente:
- No dejes que los menores se lancen de cabeza en la parte menos profunda de la piscina. Las consecuencias de una mala zambullida pueden ir desde una fractura más o menos leve hasta una lesión medular o un ahogamiento si se pierde la consciencia.
- Procura que se mojen antes de entrar en la piscina con el agua de la ducha, o que entren despacio y no del golpe. Si no lo hacen así pueden sufrir un corte de digestión que puede provocarles, como mínimo, dolores estomacales.
- Aunque no es necesario esperar dos horas después de comer para que vuelvan al agua, sí es recomendable que esperen un rato. Mientras, se les puede acompañar realizando juegos de mesa, viendo una película, pintando, moldeando…; y si son muy pequeños, pueden dormir la siesta.
- Es importante que lleven calzado cómodo y no resbaladizo en zonas mojadas.
- Apuesta por la educación y la información también con los jóvenes y adolescentes. Aunque a veces pueda resultar evidente, es necesario enviarles un mensaje de prevención: “no todo vale en la piscina”. Es conveniente recordarles que las vallas o cubiertas de las piscinas sirven para que no se hagan daño. Por ello, hay que enseñarles desde pequeños que no deben abrirlas sin la autorización de un adulto.
- Intenta que las niñas y niños aprendan a nadar cuanto antes. Es la mejor manera de que puedan disfrutar de la piscina y los adultos estén tranquilos.
- En caso de presenciar una caída o un salto peligroso, avisa inmediatamente a los servicios de emergencia y socorre a la persona herida sólo en caso de tener los conocimientos necesarios.
- Además de tener cuidado con el agua, es también muy importante tomar precauciones con el sol. Es necesario renovar periódicamente el protector solar, evitar la exposición al sol en las horas centrales del día (entre las 12:00 y las 18:00 horas) y mantener a la sombra a los bebés.
- Insiste continuamente a los pequeños y adolescentes para que digan siempre dónde están e informen a los adultos sin cambian de lugar de juegos. En el caso de los más pequeños, tenles siempre al alcance de la visión. La vigilancia continua es la medida de seguridad más eficaz. Si hay varios adultos, pueden organizar turnos de vigilancia.
- Por último, en estos espacios los hijos e hijas, los sobrinos u otros menores están bajo el cuidado y responsabilidad de los adultos que les acompañan, pero ofrecen un tiempo extraordinario para disfrutar de ellos. Jugar, preguntarles sobre sus gustos e inquietudes o escuchar sus historias son sólo algunas de las actividades que se pueden compartir entre baño y baño.