El Ayuntamiento de Parla crea refugios para los gatos ferales con contenedores reciclados

En Parla está implantado el método CER (captura, esterilización y retorno) como método ético de control de colonias felinas.

Este método evita superpoblaciones en gatos callejeros, disminuye molestias vecinales por ruidos y olores, mejora las condiciones higiénico-sanitarias de la zona, evita zoonosis y controla plagas de roedores, pequeños reptiles o insectos.

Estas colonias están esterilizadas bajo supervisión veterinaria y alimentadas y gestionadas por voluntarios/as y asociaciones de protección animal locales.

Contenedores destinados a alimentar y cobijar gatos

El Ayuntamiento de Parla ha instalado en diferentes puntos de la ciudad, un nuevo sistema para controlar las colonias felinas y ofrecer a estos animales un entorno de cobijo y alimentación seguros. Se trata de antiguos contenedores de vidrio y papel reconvertidos en alojamiento para los gatos callejeros.

Los nuevos refugios han sido creados con contenedores reciclados y con muchas manos amigas de los animales que han puesto su tiempo y su arte para que nuestros gatos puedan tener lugares seguros donde poder resguardarse, comer o descansar, mini hoteles gatunos donde hay camas, comederos y bebederos que se limpiarán a diario para asegurar así el bienestar de los gatos. Ayudarán además a que las zonas de alimentación estén limpias y darán visibilidad a Parla como municipio amigo de los animales.

Se trata de un proyecto a largo plazo en el que se seguirá trabajando y en el que continuaremos haciendo más iniciativas similares en el futuro.

La experiencia ha resultado muy positiva en los lugares en los que se ha empleado este mismo procedimiento, que por un lado consigue la reutilización del contenedor de residuos y, por otro, mejora el bienestar animal de los animales que viven en la calle. La Concejalía de Bienestar animal agradece la labor de los/las voluntarios/as que han participado en la creación de estos refugios.

Desde la Concejalía de Bienestar Animal piden mayor conciencia a los ciudadanos y que no abandonen a su felino, ya que supone condenarlo a una muerte segura. Además, el abandono está penado por Ley con sanciones de hasta 45.000 euros.