Patrimonio

Patrimonio religioso, civil y escultórico de Parla

Patrimonio histórico religioso

En la arquitectura religiosa, el municipio ha contado con diferentes infraestructuras de diferentes épocas históricas que, en su mayoría, desaparecieron con el devenir de los tiempos. En la actualidad, tanto la Iglesia de Nuestra señora de la Asunción, como la Ermita de Nuestra Señora de la Soledad son las dos únicas edificaciones religiosas que se conservan de los siglos pasados, consideradas como parte del patrimonio histórico de Parla:

Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción
También conocida como iglesia vieja, data del siglo XVI y fue reconstruida a lo largo del siglo XX. Se encuentra ubicada en el centro de Parla.

Ermita de Nuestra Señora de la Soledad
Su construcción comenzó en el siglo XVI. Más tarde, a mediados del siglo XVII fue reconstruida por el arquitecto Bartolomé Hurtado García.


Patrimonio histórico civil

Antiguo Ayuntamiento de Parla
Es un edificio de tres cuerpos, uno central más alto y dos laterales, con dos plantas y una fachada está pintada totalmente en blanco. Consta que fue reconstruido a comienzos del siglo XX, en sustitución a las antiguas casas del Ayuntamiento de los siglos anteriores, que tenían más de un uso, ofreciendo diferentes servicios municipales, pues estas albergaban en la planta baja en el lateral izquierdo los calabozos, mientras que en el derecho se situaba los toriles, ya que en las fiestas la plaza era utilizada para albergar los festejos taurinos en épocas pasadas, y al lado de estos la parte que era el utilizado como escuela y la parte central en la zona alta como Ayuntamiento.

En el proceso de su reconstrucción y restauración tan solo queda de su diseño original una parte del cuerpo central, que originalmente contaba con un soportal central sujeto por varias columnas de madera (sustituidas por nuevas columnas de ladrillo enfoscado y pintado que forman 5 arcos), una gran terraza con el balcón techado (con la restauración del edificio esta terraza se abrió y se añadió una barandilla de hierro donde exhiben las banderas), y un pequeño torreón en el que hay instalado un reloj circular encima del que se sitúa la campaña (ambos restaurados y conservados).

Actualmente el viejo ayuntamiento es utilizado para pequeños servicios, prensa de la ciudad y sedes para los sindicatos y los grupos municipales de los diferentes partidos.

Casa Grande de Bartolomé Hurtado
Se construyó en el siglo XVII (entre 1665 y 1670), tiene más de 930 metros cuadrados, conocida como casa grande. Su dueño, el Arquitecto Real Bartolomé Hurtado García, la construyó con el objetivo de pasar grandes temporadas de descanso en ella. Tras la muerte del arquitecto, en septiembre de 1698, la casa fue heredada por uno de sus hijos, Agustín Hurtado Beloso, que según el testamento debía mantenerla y conservar el escudo del Arquitecto Real hasta su muerte y después pasaría a manos de la hermandad de Nuestra Señora de la Soledad. Con el paso de los años, la casa fue adquirida por diferentes propietarios. En el año 2005 la Dirección General de Patrimonio aprueba cofinanciar la rehabilitación de la casa, proyecto que el actual Gobierno Municipal pretende reactivar.

Casa de la Panadería
Consta que puede datar aproximadamente del siglo XVII, de la misma época que la de Bartolomé, incluso podría ser el mismo el arquitecto que la diseñó, pues en el libro Arquitectura y Desarrollo Urbano de Madrid Zona Sur, (Tomo XII), se menciona que ambas casas podrían haber formado un mismo inmueble y que con el paso de los años se dividiría en varias partes.

Antiguas Escuelas Lope de Vega
Hoy Centro Cultural Almudena Grandes. Las Antiguas Escuelas Lope de Vega fueron diseñadas por el famoso arquitecto José Luis Benlliure López de Arana e inauguradas en 1928. El edificio, el primer colegio de la ciudad, fue concebido en estilo neomudéjar, de una sola planta con trazas sencillas, realizado en ladrillo visto y con teja árabe. Contaba con un soportal para resguardar de la lluvia, cinco pilares de ladrillo y vigas en madera, así como dos aulas en el interior. En lo alto, contaba con dos chimeneas para calentar las aulas, pues estaban divididas en dos módulos, uno para niñas y otro para niños, teniendo cada uno su acceso independiente. Además, disponía de vestíbulos, aseos, y despacho para el profesorado. La entrada tenía una gran verja de madera. Alrededor del edificio existía un perímetro cerrado que incluía el patio. La parte ubicada en la calle Pinto estaba cerrada por unos muros con pilares de ladrillo del mismo material del edificio, mientras que la parte que daba al patio en la calle Lope de Vega estaba cerrada con postes de madera y alambrado.

Debido a los daños producidos en la Guerra civil, habiendo quedado del edificio original tan solo la estructura, unos muros y la cubierta, en 1941 el arquitecto Pedro Sánchez Sepúlveda se encargó de las obras de reconstrucción. No cambió mucho el diseño original, pero sí se modificaron los accesos a las aulas, abriendo las puertas en los laterales y añadiendo unos peldaños al desnivel existente. Ya en el siglo XX, las Antiguas Escuelas Lope de Vega fueron trasladadas y este edificio quedó sin nombre.

En 1984 pasó a ser utilizado como biblioteca municipal, lo que requirió unas obras de adaptación para unificar las aulas y se creó una entreplanta. Las obras fueron realizadas por los arquitectos Ricardo López de Rego Uriarte y Juan Miguel Morell y Fuentes. Además de las reformas interiores, se retiraron el vallado y muros exteriores, quedando este edificio más accesible y desapareciendo la zona del patio, que sería aprovechada años después para la construcción de la nueva casa de la cultura.

En el año 2000, el edificio deja de ser utilizado como biblioteca, debido a la construcción de unas nuevas instalaciones de mayor capacidad, quedando temporalmente sin uso, hasta que finalmente se estableció en él la Escuela Municipal de Teatro. Paralelamente, los soportales se han venido utilizando para la realización de diferentes eventos durante todo el año, destacando, entre otros, la representación del Belén Viviente en el que participan asociaciones y colectivos de Parla.

En el último trimestre del año 2020, se realizaron unas primeras obras de restauración del edificio para la reparación del tejado y la recuperación de las dos históricas chimeneas. Meses después, ya en 2021, y con subvención de Fondos Europeos, dio comienzo una segunda fase de restauración, esta vez en su interior, para adaptarlo y convertirlo en centro cultural y sala de exposiciones. Un centro que, tal y como se aprobó en Pleno en marzo de 2022, a propuesta de la Concejalía de Presidencia del Ayuntamiento de Parla, lleva el nombre de la escritora Almudena Grandes, como reconocimiento póstumo a su labor cultural, social y política. El nuevo Centro Cultural Almudena Grandes ha sido inaugurado en diciembre de 2022, siendo Alcalde de Parla D. Ramón Jurado Rodríguez.

Escultura urbana
En Parla existente diferentes esculturas urbanas, ubicadas en diferentes espacios de la vía urbana, plazas, parques e incluso algunas forman un conjunto arquitectónico con fuentes, otras se ubican en rotondas, aunque las más destacables a nivel histórico cultural son:

  • Monumento del Calvario y Vía Crucis
    Representación de la crucifixión de Cristo, formado por un conjunto de figuras en color blanco (las tres Marías, un soldado romano y tres cruces grandes realizadas en piedra donde la cruz central tiene una figura de Jesucristo y las laterales a los dos ladrones crucificados), dentro de un recinto vallado ajardinado, donde también se encuentra el escudo de Bartolomé Hurtado García.
  • Cola de la ballena
    La cola de la ballena representa una leyenda urbana del barrio de La Laguna, donde se dice que en la antigua laguna que se secó vivía una ballena, este monumento se encuentra situado en el parque de la ballena construido en el año 2000, cerca de la entrada norte de Parla.
  • Cuadros urbanos
    Son numerosas las obras que forman parte de la arquitectura urbana del municipio parleño que decoran diferentes zonas del municipio, muchas de las cuales son creaciones del autor Paco Lara. Puerta de la Tolerancia, Dúo, Hombre sentado, Los bañistas, La Cheminee, Bodegón, Tres músicos, Guernica, La Guitarra, Maternidad, Pueblo en Lucha, Geometría, Por Parla… Son solo algunos nombres de las magníficas piezas artísticas que pueden disfrutarse recorriendo la ciudad.

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